Todas las frases de Christian Slater
- De la película: El nombre de la rosa
- De la película: Amor a quemarropa
“Más vale tener un arma y no necesitarla que necesitarla y no tenerla.”
- De la película: Nymphomaniac. Volumen 1
“Vemos el alma de los árboles en invierno.”
- De la película: La buena esposa
- De la película: Exodus: Dioses y Reyes
“- ¿Dónde estabas?
- Viéndote fracasar.
- ¿Qué hago?
- De momento mirar.” - De la película: El nombre de la rosa
“Nunca he lamentado mi decisión porque aprendí de mi maestro lo que era sabio, bueno y verdadero. Cuando por fin nos separamos, me entregó sus lentes. Me dijo que era joven, pero que algún día me servirían. Y ahora las llevo puestas sobre mi nariz mientras escribo esto. Luego me abrazó cariñosamente, como un padre, y me hizo seguir mi camino....” (continúa)(seguir leyendo)
- De la película: Exodus: Dioses y Reyes
“He venido a decirte que se avecina algo que yo no puedo controlar.”
- De la película: Corazón indomable
- De la película: Corazón indomable
“- ¡Tienes un perro! ¿cómo se llama?
- No lo sé, no me lo ha dicho.” - De la película: El nombre de la rosa
“- Estás enamorado.
- ¿Eso es malo?
- Para un monje, presenta ciertos problemas.
- ¿No predicó Santo Tomás de Aquino el amor por sobre todas las virtudes?
- Sí. El amor a Dios, Adso. El amor a Dios.
- ¿Y el amor a la mujer?
- Sobre la mujer, Santo Tomás de Aquino sabía muy poco. Las escrituras son claras.” - De la película: El nombre de la rosa
- De la película: El nombre de la rosa
“- Penitenziagite.
- ¿Qué significa?
- Que el jorobado, sin duda, fue un hereje alguna vez. Penitenziagite era el grito de batalla de los Dolcinites.
- ¿Dolcinites? ¿Quiénes eran, Maestro?
- Los que creían en la pobreza de Cristo. También los Franciscanos. Pero decían que todos debían ser pobres. Así que asesinaron a los ricos.” - De la película: El nombre de la rosa
“Mi maestro confiaba en Aristóteles, los griegos y en su sorprendente y lógica inteligencia. Desafortunadamente, mis temores no eran fantasmas de mi joven imaginación.”
- De la película: El nombre de la rosa
“Habiendo llegado al final de mi vida de pecado, con mi cabeza cana, me preparo para dejar en este pergamino, mi testimonio de los maravillosos y terribles hechos que vi en mi juventud, hacia finales del año de Nuestro Señor. Que Dios me dé la sabiduría y la gracia de ser fiel cronista de los hechos ocurridos en una remota abadía en el sombrío...” (continúa)(seguir leyendo)
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