Todas las frases de Jesús de Nazaret
“Felices son los misericordiosos, puesto que a ellos se les mostrará misericordia.”
“Traten a los demás como ustedes quisieran ser tratados.”
“Bienaventurados los que no vieron, y creyeron.”
“Felices son los de corazón puro, puesto que ellos verán a Dios.”
“El mal no es lo que entra en la boca del hombre, sino lo que sale de ella.”
“Lo que entra por la boca del hombre no le hace impuro. Al contrario, lo que hace impuro al hombre es lo que sale de su boca.”
“No juzguéis a los demás si no queréis ser juzgados. Porque con el mismo juicio que juzgareis habéis de ser juzgados, y con la misma medida que midiereis, seréis medidos vosotros.”
“Porque viendo no ven, y oyendo no oyen, ni entienden.”
“Nos hartamos de andar por sendas de iniquidad y perdición, atravesamos desiertos intransitables.”
“Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados.”
“Hay más dicha en dar que en recibir.”
“Al que te abofetee en la mejilla derecha ofrécele también la otra: al que quiera pleitear contigo para quitarte la túnica déjale también el manto; y al que te obligue a andar una milla vete con él dos. A quien te pida da, y al que desee que le prestes algo no le vuelvas la espalda.”
“¡No mintáis, y no practiquéis lo que odiáis! porque todo se revela delante del rostro del Cielo. Pues no hay nada escondido que no será revelado, y no hay nada oculto que quedará sin ser descubierto.”
“Ama a tu prójimo como a ti mismo.”
“Más numerosos que los cabellos de mi cabeza son los que me odian sin motivo.”
“¿Por qué me llamas bueno? Nadie es bueno, sino uno solo, Dios.”
“Bienaventurados los mansos, porque ellos recibirán la tierra por heredad.”
“Felices son los que tienen conciencia de su necesidad espiritual, puesto que a ellos pertenece el reino de los cielos.”
“Felices son los de genio apacible, puesto que ellos heredarán la tierra.”
“No juzguéis y no sereis juzgados, no condeneis y no sereis condenados, perdonad y sereis perdonados, dad y se os dará. Porque la medida que uséis con los demás se usará con vosotros.”
“Perdónales, Padre, porque no saben lo que hacen.”
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