La medicalización de la vida
En los últimos años el uso de los fármacos ha cambiado. No hay más que mirar la televisión para darnos cuenta de que existe publicidad para cualquier tipo de enfermedad o molestia de la vida cotidiana. La sensación es que existe una medicalización de la vida en general, no unicamente del enfermo; tomamos fármacos para combatir la tristeza, la obesidad, el desamor o la ansiedad que produce realizar un examen. Pero el uso excesivo de medicamentos puede tener graves consecuencias, incluida la muerte. En los Estados Unidos se considera la excesiva medicalización la tercera causa de mortalidad. Quizás deberíamos entender que los fármacos tienen que ser utilizados solo si estamos enfermos de verdad y recordar que la esperanza de vida de las personas ha aumentado no por el incremento de fármacos sino por la mejora de las condiciones de vida.
Comentarios sobre la noticia
Otras noticias