El silencio habla
Frases de “El silencio habla” 20 citas
“La planta que tienes en casa…, ¿la has mirado detenidamente alguna vez? ¿Has permitido que ese ser familiar pero misterioso que llamamos planta te enseñe sus secretos? ¿Te has dado cuenta de lo pacífica que es, de que está rodeada de un campo de quietud? En el momento en que te das cuenta de la quietud y de la paz que emana, esa planta se...” (continúa)(seguir leyendo)
“La reencarnación no te ayudará si en la próxima encarnación sigues sin saber quién eres.”
“La alegría y las ganas de jugar de un perro, su amor incondicional y su disposición a celebrar la vida en cualquier momento suelen contrastar agudamente con el estado interno del dueño del perro: deprimido, ansioso, cargado de problemas, perdido en el pensamiento, ausente del único momento y lugar que existen: el Aquí y el Ahora. Uno se pregunta...” (continúa)(seguir leyendo)
“El ego siempre está buscando. Busca añadirse algo más de esto o de lo otro para completarse. Esto explica su preocupación compulsiva por el futuro.”
“La verdadera inteligencia actúa silenciosamente. Es en la quietud donde encontramos la creatividad y la solución a los problemas.”
“He aquí un ejercicio espiritual que puedes practicar: no te tomes tus pensamientos demasiado en serio.”
“Cuando reconoces que hay una voz en tu cabeza que pretende ser tú y que nunca deja de hablar, estás saliendo de la identificación inconsciente con la corriente de pensamientos. Cuando notas esa voz, te das cuenta de que tú no eres la voz —el pensador—, sino quien es consciente de ella. La libertad estriba en conocerte a ti mismo como la...” (continúa)(seguir leyendo)
“En último término, la infelicidad no surge de las circunstancias de tu vida, sino del condicionamiento de tu mente.”
“La imagen de víctimas que algunas personas tienen de sí mismas es tan fuerte que se convierte en el núcleo central de su ego. El resentimiento y los agravios forman parte esencial de su sentido del yo.”
“Yo no soy mis pensamientos, emociones, percepciones sensorias y experiencias. Yo no soy el contenido de mi vida. Yo soy Vida. Yo soy el espacio en el que ocurren todas las cosas. Yo soy conciencia. Yo soy el Ahora. Yo Soy.”
“Cuando reconoces la santidad, la belleza, la increíble quietud y dignidad en las que una flor o un árbol existen, tú añades algo a esa flor o a ese árbol. A través de tu reconocimiento, de tu conciencia, la naturaleza llega a conocerse a sí misma. ¡Alcanza a conocer su propia belleza y sacralidad a través de ti!”
“La envidia es un derivado del ego, que se siente disminuido cuando a otra persona le pasa algo bueno, o cuando alguien tiene más, sabe más o puede hacer más que tú. La identidad del ego depende de la comparación y siempre quiere más. Se agarra a cualquier cosa. Si todo lo demás fracasa, puedes fortalecer tu ficticio sentido del yo sintiéndote...” (continúa)(seguir leyendo)
“Si con el fin de liberarte te marcas metas egóticas que te potencian o te hacen sentirte importante, aun que las consigas, no te sentirás satisfecho. Márcate metas, pero sabiendo que alcanzarlas no tienen la menor importancia. Cuando algo surge de la presencia, significa que este instante no es un medio para un fin: la acción es satisfactoria...” (continúa)(seguir leyendo)
“¿Vives dramas frecuentes y repetitivos en tus relaciones íntimas? ¿Desacuerdos relativamente insignificantes que provocan violentas discusiones y dolor emocional? Los patrones egóticos básicos están en la raíz de estas experiencias: la necesidad de tener razón y, por supuesto, de que el otro esté equivocado; es decir, la identificación con...” (continúa)(seguir leyendo)
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