El temor de un hombre sabio
Título: El temor de un hombre sabio
Título original: The Wise Man's Fear
Autor:Patrick Rothfuss
Año de primera publicación: 2011
Compra este libro enTítulo original: The Wise Man's Fear
Autor:Patrick Rothfuss
Año de primera publicación: 2011
Frases de “El temor de un hombre sabio” 52 citas
“Si quieres saber quién eres, camina hasta que no haya nadie que sepa tu nombre. Viajar nos pone en nuestro sitio, nos enseña más que ningún maestro, es amargo como una medicina, cruel como un espejo. Un largo tramo de camino te enseñará más sobre ti mismo que cien años de silenciosa introspección.”
“O lo verá, o no lo verá. En su momento, a su manera. —Encogió los hombros—. O no, y el sol seguirá saliendo todas las mañanas.”
“Tienes una piedra en el corazón, y hay días en que pesa tanto que no se puede hacer nada.”
“Y si eso significaba que Denna no era completamente mía, ¿qué? Yo siempre sería la persona a la que ella podía acudir sin temor a recriminaciones ni preguntas. Así que no intentaba conquistarla y me contentaba con jugar una hermosa partida. Pero siempre había una parte de mí que deseaba algo más.”
“—Me ayudas con solo estar aquí —dije con sinceridad—. El simple hecho de verte mejora mi estado de ánimo.”
“De vez en cuando me sienta bien tomarme unas vacaciones de mí misma. Tú me ayudas a eso. Eres mi puerto seguro en un mar infinito y tempestuoso.”
“—¿Cuál es el corazón del Lethani? —preguntaba a Vashet. —El éxito y la acción correcta. —¿Qué es más importante, el éxito o la acción correcta? —Son lo mismo. Si actúas correctamente, consigues el éxito. —Pero otros consiguen el éxito mediante actos incorrectos —objeté. —Los actos incorrectos nunca conducen al éxito —afirmó Vashet, tajante—. Si...” (continúa)(seguir leyendo)
“No basta con querer algo para que sea verdad.”
“Las cosas se ven más fácilmente desde los bordes. El peligro despierta la mente dormida. Hace que veamos claras algunas cosas.”
“Un árbol no provoca una tormenta, pero cualquier idiota sabe dónde va a caer el rayo.”
“Amamos lo que amamos. La razón no entra en juego. En muchos aspectos, el amor más insensato es el amor más verdadero. Cualquiera puede amar algo por algún motivo. Eso es tan fácil como meterse un penique en el bolsillo. Pero amar algo a pesar de algo es otra cosa. Conocer los defectos y amarlos también. Eso es inusual, puro y perfecto.”
“Cuando quieres algo, tienes que asegurarte de que eso te quiere a ti, porque si no, pasarás muchos apuros persiguiéndolo.”
“En todos nosotros hay una mente que utilizamos para todos nuestros actos conscientes. Pero también hay otra mente, una mente dormida. Es tan poderosa que la mente dormida de un niño de ocho años puede lograr en un segundo lo que las mentes despiertas de siete miembros del Arcano no han logrado en quince minutos.”
“Cualquier cosa que una a dos personas es íntima. Una conversación, un beso, un susurro. Hasta pelear es íntimo. Pero nosotros no somos extraños respecto al sexo. No nos avergonzamos de él. No creemos que sea importante quedarnos el sexo de otra persona para nosotros solos, como un avaro que acumula oro.”
“Encajábamos como dos bailarines, como si hubiéramos practicado aquel abrazo un millar de veces.”
“La mayoría de los secretos son secretos de la boca. Chismes compartidos y pequeños escándalos susurrados. Esos secretos ansían liberarse por el mundo. Un secreto de la boca es como una china metida en la bota. Al principio apenas la notas. Luego se vuelve molesta, y al final, insoportable. Los secretos de la boca crecen cuanto más los guardas, y...” (continúa)(seguir leyendo)
“Yo quería respuestas, y pese a lo que creía, Elodin había estado intentando dármelas. Lo que yo había interpretado como un secretismo malicioso por su parte era, en realidad, una incitación persistente a la búsqueda de la verdad.”
“Cada mujer es como un instrumento, y espera que la entiendan, la amen y la toquen con delicadeza, para por fin hacer sonar su verdadera música.”
“Un largo tramo de camino te enseñará más sobre ti mismo que cien años de silenciosa introspección.”
“—¡Bárbaros! —dijo enjugándose las lágrimas—. Se me había olvidado lo atrasados que sois. Mi rey poeta también era así. Tardó muchísimo en comprender la verdad: que existe una gran diferencia entre el pene y el corazón.”
“La gente siempre está observando cosas. Lo que debería hacer es ver. Yo veo las cosas que miro.”
“Conocer los defectos y amarlos también. Eso es inusual, puro y perfecto.”
“El clavo más alto es el que primero recibe el martillazo.”
“Oí un pequeño sollozo proveniente de las sombras que me heló el corazón y le arrancó un trozo.”
“—¿Y la caída? —pregunté. —Si te caes, te caes —dijo Elodin encogiendo los hombros—. A veces, caer también nos enseña cosas. En los sueños, muchas veces caes antes de despertar.”
“Se puede dividir el infinito un número infinito de veces, y las partes resultantes seguirán siendo infinitamente grandes”
“Creía que la Universidad sería diferente del resto del mundo, pero veo que pasa como en todas partes: la gente trata de satisfacer a unos capullos groseros y pedantes como Ambrose, mientras que a las buenas personas como Simmon no les hacen caso por simplonas.”
“—Existen dos tipos de poder: el inherente y el otorgado —dijo revelándome el tema de conversación del día—. El poder inherente lo posees como parte de ti mismo. El poder otorgado te lo prestan o te lo dan otras personas.”
“Aún notaba el temblor de su corazón, como un pájaro enjaulado batiendo las alas contra mi pecho.”
“Me sudaban las manos y notaba un cosquilleo en el estómago. Las pruebas eran muy eficaces. Las pruebas eran importantes. Las pruebas eran como un ensayo. Pero lo único que de verdad importa es lo que ocurre cuando el público te está mirando. Esa es una verdad que saben todos los artistas de troupe.”
En realce