Recuerdos de la guerra de España
Frases de “Recuerdos de la guerra de España” 14 citas
“Cuando uno piensa en la gente que apoya o ha apoyado el fascismo, se queda sorprendido de su diversidad. ¡Vaya cuadrilla! ¡Imaginemos un programa que, de algún modo, metiera durante un tiempo en el mismo barco a Hitler, Pétain, Montagu Norman, Pavelitch, William Randolph Hearst, Streicher, Buchman, Ezra Pound, Juan March, Cocteau, Thyssen, el...” (continúa)(seguir leyendo)
“Por lo que respecta a las masas, los extraordinarios cambios de opinión que ocurren a cada instante, las emociones que pueden abrirse y cerrarse como un grifo, son el resultado de la hipnosis a la que las someten los periódicos y la radio.”
“La teoría nazi niega específicamente que haya algo parecido a «la verdad». No existe, por ejemplo, aquello que llamamos la «ciencia», tan solo «ciencia alemana», «ciencia judía», etcétera. El objetivo tácito de este modo de pensar es un mundo de pesadilla en el que el líder máximo, o bien la camarilla dirigente, controle no solo el futuro, sino...” (continúa)(seguir leyendo)
“Todo el mundo se cree las atrocidades del enemigo y descree de las que habrían cometido los de su propio bando, sin preocuparse siquiera en tener en cuenta las pruebas.”
“Todo lo que estos trabajadores demandan es lo que ellos considerarían el mínimo indispensable sin el cual es imposible vivir humanamente. Comida suficiente, una vida sin el temor acuciante del desempleo, la certeza de que los hijos tendrán oportunidades de prosperar, un baño una vez al día, ropa de cama limpia con una frecuencia razonable, un...” (continúa)(seguir leyendo)
“Aquellos que toman la espada perecen por la espada, y los que no, mueren de enfermedades apestosas.”
“Primero que nada los recuerdos físicos: los sonidos, los olores, la superficie de las cosas. Es curioso que, de la guerra de España, recuerde más vívidamente que cualquier otra cosa que sucediera luego la semana de «adiestramiento» que recibimos antes de que nos enviaran al frente: los enormes barracones de caballería en Barcelona, con sus...” (continúa)(seguir leyendo)
“¿Cómo se escribirá la historia de la guerra de España? Si Franco continúa en el poder, serán sus acólitos los que escriban los libros de historia, y —para insistir en el punto anterior— aquel inexistente ejército ruso se convertirá en un hecho histórico, y los niños de las generaciones venideras lo estudiarán en las escuelas.”
“La gente suele olvidar que, cerca del frente, un soldado está por lo común demasiado hambriento, asustado o muerto de frío, o sobre todo demasiado cansado para preocuparse de las causas políticas de la guerra.”
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