Frases sobre la moral
En archivo 331 frases, aforismos, citas sobre la moralMoral
La palabra moral viene del latín y significa hábitos, bueno o ética. La moral se supone que te enseña cómo ser una mejor persona. Si tienes una moral fuerte, significa que eres un buen miembro de la sociedad. Si alguien es un tramposo y un mentiroso, podrías decir que no es una persona moral. Para saber más tienes que leer la siguiente recopilación de frases, citas y aforismos sobre la moral.
“Ninguna moral puede fundarse sobre la autoridad, ni siquiera aunque la autoridad fuera divina.”
“¿Por qué Europa ha respondido tan mal a su crisis? Ya he apuntado parte de la respuesta: muchos dirigentes del continente parecen decididos a «helenizar» el cuento y creer que quienes atraviesan dificultades —no solo Grecia— han llegado ahí por culpa de la irresponsabilidad fiscal. Y, con esta premisa falsa, se busca un remedio falso: si el...” (continúa)(seguir leyendo)
“Queda claro que la predicación moral cristiana no es una ética estoica, es más que una ascesis, no es una mera filosofía práctica ni un catálogo de pecados y errores. El Evangelio invita ante todo a responder al Dios amante que nos salva, reconociéndolo en los demás y saliendo de nosotros mismos para buscar el bien de todos. ¡Esa invitación en...” (continúa)(seguir leyendo)
- De la película: Paprika
“Moral, sentimientos, responsabilidades. No acabo de comprender lo que dicen los adultos. En fin, que te parece si charlamos nosotros dos un ratito, porque somos amigos.”
- De la película: My Fair Lady
- De la película: Dogville
“- Estás convencida de que nadie puede alcanzar tu alto nivel moral y perdonas a todos. No se me ocurre arrogancia mayor. Tú, mi hija adorada perdonas a todos con excusas que jamás admitirías para ti.
- ¿No debo ser clemente?
- Sí, debes serlo. Cuando corresponda. Pero debes mantener tus principios. Se lo debes a ellos. Se lo debes. Es lo justo.” - De la película: Espartaco
- De la película: El pequeño salvaje
“Cuanto me hubiese gustado que me entendiera. Poder expresarle hasta que punto el dolor del mordisco me llenaba de satisfacción. ¿Podía alegrarme? Tenía la prueba de que el sentimiento de lo justo y de lo injusto ya no era extraño al corazón de Víctor. Al darle, o más bien al provocarle, ese sentimiento acababa de elevar al hombre salvaje a la...” (continúa)(seguir leyendo)
- De la película: La educación de las hadas
- De la película: La saga Crepúsculo: Eclipse
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